TRAS EL GOLPE que significó la plaga de la roya para los cultivos cafetaleros del país, es conocida la crisis que aún ahora enfrenta ese negocio.
A los productores les afectó en mayor o menor medida, lo que obligó a implementar un programa de rescate por SAGARPA aún con José Calzada.
Hay quien asegura que se activó demasiado tarde y que no se tomaron las previsiones adecuadas incluso por los cafeticultores.
Lo cierto es que de 6.5 millones de sacos de 60 kilogramos que se llegaron a tener, la producción se desplomó a 2 millones y ya se recuperó a 3.8 millones.
SAGARPA proyectó que este año o a más tardar en 2019 se llegaría a 4.5 millones de sacos, lo que se observa inalcanzable.
La caída productiva se da justo cuando las cotizaciones mundiales del café están por los suelos. Según PROMECAFE que lleva Ronald Peters hoy el precio está 1.20 dólares la libra vs 1.90 dólares el costo de producción.
Países como Vietnam, Honduras, Colombia y Brasil han incrementado su oferta y hay sobreproducción.
Sin embargo también el consumo ha subido y se espera que siga en esa tesitura en los siguientes 2 ó 3 años.
El café está de moda y aquí lo vemos con cadenas como Starbucks que lleva Christian Gurría, Cielito Querido a cargo de Alma Rosa García Puig, Café Punta del Cielo de Pablo González Cid.
El problema es que el productor sólo se queda con el 2% de lo que paga el consumidor, pese a que de un kilo de café salen cuando menos 80 tazas que se sitúan entre 40 y 50 pesos.
Para que México aproveche el repunte se necesita que SAGARPA a cargo de Baltazar Hinojosa no baje la guardia.
La dependencia ni siquiera ha concluido el último censo: se estima que de 470 mil productores ya únicamente hay 250 mil y de 600 mil hectáreas se está en 350 mil.
Los estados más afectados son los que más producen como Chiapas, Veracruz, Puebla o Oaxaca con productores de 1.5 hectáreas que están a nivel de subsistencia.
Debe aumentar la asistencia técnica pero el número de expertos de SAGARPA, que anda en unos 400, es insuficiente.
Además con Hinojosa de inmediato iniciaron los cambios en el equipo. Se conoce la sustitución del subsecretario Jorge Narváez por Jorge Luis Zertuche.
Esto se dio en el contexto del Consejo Internacional del Café que se realizó el mes pasado en la CDMX con el grueso de los productores y las firmas más importantes del mundo en lo que hace al consumo.
Narváez ya solo inauguró y no pudo emitir su discurso porque vía telefónica se le comunicó su cese.
Otros funcionarios del PIAC, entidad que coordina los esfuerzos para el café y que comanda Santiago Argüello ya también fueron separados.
Como imaginará hay zozobra por el riesgo de que se frene de golpe la estrategia en favor del café y que haya que esperar hasta el próximo sexenio, en vez de habilitar un esfuerzo transexenal.
Los miembros de AMECAFE que comanda Cruz Argüello Miceli rechazaron la oferta de realizar el próximo Foro Mundial del Café. Se consideró que no hay condiciones y que podría replicarse la ausencia gubernamental de la reunión de abril. Brasil entró al quite.
Así que complejo panorama para la cafeticultura mexicana.
Fuente: El Heraldo / Alberto Aguilar