Cada día aumenta la mano de obra femenina en el sector primario de México, pero de 100 mujeres que hacen labores agropecuarias en el campo nacional, 71% no reciben pago por ser actividades de sobrevivencia familiar, al igual que 45% de los varones; de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional Agropecuaria (ENA) 2017, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Algunos de los resultados del sondeo, arrojan que en el país hay 11 millones 800 mil puestos de trabajo en actividades agropecuarias, de los cuales 12.8 % son ocupados por mujeres y cita que el pago promedio es de 167 pesos diarios en jornadas de más de siete horas durante 25 días al mes.
En contratos de mano de obra femenil en el sector agrícola, Chihuahua ocupa el primer sitio nacional, con 32 %, seguido de Baja California 26.6 % y el Estado de México 25.5 %. Las proporciones más bajas corresponden a Tamaulipas con 6.8 %, Quintana Roo con 6.7 % y Morelos, con un porcentaje del 5.7 por ciento.
Los estados con mayor proporción de mano de obra no remunerada en el sector primario son Ciudad de México y Tlaxcala, con 44.1 y 40.4 %, respectivamente. En el extremo opuesto están Sonora, Chihuahua y Nayarit, donde 83.1, 81.9 y 81.6 % de los trabajadores, respectivamente, reciben remuneración.
En contraste, el secretario de Desarrollo Agropecuario de Baja California, Manuel Valladolid, aseguró que en la asignación de los apoyos para el sector agroalimentario en la entidad, se ha dado prioridad a la participación de las mujeres.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Mujeres en Red, en 12 entidades, 15 mil personas del sexo femenino trabajan en la elaboración de productos agroalimentarios con remuneración.
“La intención de la asociación es encontrarlas, capacitarlas, agruparlas para que se conviertan en mujeres productoras. No sólo es dinero extra; es todo lo demás, es decir, empoderamos a las mujeres, la mayoría de las cuales son de comunidades rurales”, subraya Catalina García, integrante de esa agrupación. (La Jornada)