La agricultura hidropónica es el método utilizado para cultivar plantas sin suelo, la optimización de estos cultivos se desarrolla mediante las raíces, dependiendo su buen desarrollo en función de las soluciones nutritivas y elementos químicos que reciben.
El tomate es consumido mundialmente por su valor nutritivo y antioxidante, pero esta hortaliza tiene problemas de polinización en invierno por lo que es necesario recurrir a métodos de cultivo in -vitro haciendo la función de polinización y cuajado del fruto.
Calidad de los cultivos hidropónicos desarrollados en ambientes controlados.
El tomate es una de las plantas que crecen en este tipo de cultivo, siendo importante en la industria alimenticia, pero hay patógenos asociados como las manchas producidas por hongos que pueden afectar al cultivo.
Las cámaras de cultivo hidropónico son utilizadas para un mejor desarrollo y calidad de las cosechas y nos pueden ayudar a controlar las plagas y enfermedades.
La planta se trasplanta utilizando sustratos con composiciones similares a las que se dan en la tierra, al ser desarrolladas en ambientes controlados influyen de manera esencial en la calidad de los alimentos.
Cámaras de cultivo capaces de aumentar la productividad
Estas cámaras de cultivo son capaces de evitar la pérdida de agua, controlar la temperatura, pH, frecuencia de riego y suministro de agua en las cantidades necesarias.
Los ensayos en ambientes controlados mediante el método hidropónico han demostrado que aumentando la concentración de nutrientes aumenta su productividad.
Estos métodos ayudan a un estudio más profundo e incluso a modificar su desarrollo en distintas variedades de tomate cómo han demostrado los estudiantes de la Universidad de Alicante, se establecen diferencias entre un tomate cultivado tradicionalmente y otro hidropónico exteriormente y en la pulpa.