Los gobiernos de México y Guatemala firmaron un Memorándum de Entendimiento para regular la introducción a nuestro país de ganado bovino para sacrificio inmediato y engorda terminal, originario y procedente de Centroamérica, con el propósito de dar fin al trasiego de ganado centroamericano, que se practicó por muchos años y que ponía en riesgo el estatus sanitario de la ganadería mexicana.
El acuerdo fue firmado por el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos Arámbula, y el ministro de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA) de la República de Guatemala, Mario Méndez Montenegro.
Tras la firma del documento de trascendencia para el sector pecuario de ambas naciones, el secretario Víctor Villalobos Arámbula, afirmó que esta iniciativa, anhelada por años, garantiza la trazabilidad y seguridad sanitaria de la ganadería del país, sustentado por el manejo de acciones transparentes y sin corrupción en la importación de ganado de Centroamérica.
Aseguró que esta acción histórica también abre la oportunidad de un mayor mercado agroalimentario bilateral y el intercambio comercial de ganado de manera controlada, con la voluntad política y disponibilidad de los gobiernos de ambos países.
Afirmó que en cumplimento de las instrucciones del presidente Andrés Manuel López Obrador se seguirán impulsando las acciones en la búsqueda de aumentar la presencia de México en la cooperación técnica e intercambio comercial agropecuario y pesquero con países de Centro y Sudamérica.
El titular del MAGA, Mario Méndez Montenegro, indicó que Guatemala y México son tierra que alimenta, gracias a su privilegiada ubicación geográfica, biodiversidad y manejo comercial, a más de 145 millones de habitantes, con la colaboración mutua que permite resolver temas migratorios, reducir índices de desnutrición y fortalecer acciones de sanidad agropecuaria.
Aseguró que con el acuerdo signado se garantiza la sanidad y calidad de los productos agropecuarios que pasan por esta frontera, con estrictos mecanismos de control para erradicar enfermedades como brucelosis y tuberculosis, mediante altos estándares de trazabilidad y sanidad internacionales.
La firma de este convenio, dijo, es sinónimo de credibilidad en la exportación de ganado en pie, carne de bovino y material genético, y representa una medida histórica para ordenar y reducir el trasiego de ganado; esta disposición, agregó, más adelante será propuesta a Honduras y Nicaragua.
Puntualizó que estas acciones son de mutuo beneficio para México y Guatemala, y para sus sectores ganaderos, pues contribuyen a resguardar la condición sanitaria de la producción en la región.
Subrayó que con la nueva disposición en diciembre se podrían exportar de Guatemala a México alrededor de 80 mil cabezas de ganado en pie, y si logran exportar un millón de animales al año obtendría divisas por dos mil millones de dólares.
El presidente de la Comisión de Ganadería de la Cámara de Diputados, Eduardo Ron Ramos, resaltó el trabajo institucional que hoy da resultados en favor del sector pecuario nacional, logro de una apertura para el diálogo entre legisladores, productores y autoridades.
En estos trabajos, destacó la participación de sus compañeros diputados federales de Chiapas, Roque Rovelo, y de Veracruz, Maximiliano Ruíz Arias (recién fallecido), cuyos resultados indicarán la certeza de que todo el ganado que entra a México es legal y sano, lo que también implica soberanía y seguridad alimentaria.
El director ejecutivo del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), Efraín Medina, hizo un reconocimiento al Gobierno de México y a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural por esta decisión histórica que impactará social y económicamente en la región centroamericana.
Se trata, abundó, de una acción de generación de políticas comunes agrosanitarias, que contribuyen con diferentes medidas a la prevención, control y erradicación de plagas y enfermedades, lo cual permitirá generar una producción saludable e inocua para todos los habitantes de la región.
“Nos compromete a aportar, incondicionalmente, todo lo que esté de nuestra parte para cumplir con nuestro objetivo de apoyar a los ministerios y secretarías de Agricultura de la región para fortalecer sus acciones, en este caso, de salud animal y de esta manera lograr que el programa sea sólido y consistente en el tiempo”, comentó.
El presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), Oswaldo Cházaro Montalvo, precisó: “los ganaderos de México, representados en más de un millón 800 mil familias del sector pecuario, nos manifestamos a favor de esta medida que significa la protección de la sanidad de nuestros hatos”.
Subrayó que estas acciones, además, son la vía para un intercambio comercial justo y ordenado entre ambos países, mediante un cabal cumplimiento de estos dispositivos que terminan con una práctica de informalidad y de percepción de criminalidad en la zona.
“Así también invocamos el principio de reciprocidad que debe imperar en todos los acuerdos, a manera de que también el ganado mexicano, principalmente para genética, tenga un sistema legal accesible hacia esa región hermana, lo que repercute en el manejo de una ganadería sana y competitiva para la exportación a otros países”, abundó.
El Programa de Trabajo subraya que el ganado a exportar procederá de ranchos certificados por el MAGA como libres de tuberculosis bovina (Tb) y brucelosis (Br), el cual se distinguirá con el Arete Electrónico Centroamericano (AEC), que cuenta con tecnología de radio referencia. Para ello, se dejará sin efecto la identificación del arete 35 que se utilizaba en la movilización del ganado guatemalteco con destino a México.
Técnicos del MAGA y representantes del OIRSA verificarán el cumplimiento de cuarentena de 21 días del ganado en su rancho de origen o en los acopios constituidos para ello. Hasta el momento, el país centroamericano cuenta con 70 ranchos certificados.
Posteriormente, el ganado se transportará a instalaciones de tránsito y embarque administradas por el MAGA. El OIRSA colocará flejes a los vehículos y emitirá una carta complementaria al certificado de importación.
Cabe precisar que el ganado transportado deberá ser menor a 30 meses de edad, debido a que Guatemala no está certificado como país de bajo riesgo de encefalopatía espongiforme bovina, mejor conocida como enfermedad de las vacas locas.
La Secretaría de Agricultura y el MAGA manifestaron su interés de implementar un programa piloto enfocado en fortalecer del estatus sanitario de ambos países en los sectores de la producción de carne de bovino, que operará entre noviembre del 2019 y noviembre del 2024.
En el evento estuvieron presentes los titulares de Salud Animal de Guatemala, David Orellana, y de México, Juan Gay Gutiérrez, quien acudió en representación del director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Francisco Javier Trujillo Arriaga, así como los representantes de OIRSA en México, Héctor Manuel Sánchez Anguiano, y en Guatemala, Nidia Sandoval Alarcón.