Una vez consolidados los vinos mexicanos en el mercado norteamericano, el siguiente paso es conquistar los mercados europeos, mencionó el Consejo Mexicano Vitivinícola (CMV), quien añadió que para lograrlo se reintegraron a la Organización Internacional de la Viña y el Vino para ser socios oro.
“México no puede quedarse ajeno a las tendencias mundiales y la forma más efectiva de involucrarnos fue la decisión sobre nuestra reintegración a la Organización y convertirnos en socios oro del museo “Ciudad del vino” (la Cité du Vin)”, comentó el presidente del Consejo Mexicano Vitivinícola, Daniel Milmo Brittingham.
Aseguró que cada 2 años se realiza la mayor feria mundial del sector del vino y las bebidas espirituosas Vinexpo, que se lleva a cabo en Burdeos, al suroeste de Francia, donde el (CMV) presentó algunos de los mejores vinos mexicanos, evento al que asistió un centenar de profesionales del sector.
La cata tuvo lugar a principios de este mes en el célebre museo y centro de exposiciones del vino de la ciudad más emblemática de los vinos franceses, en el edificio vanguardista se degustaron vinos de calidad premium de las bodegas mexicanas Casa Madero, Monte Xanic, Viña Doña Dolores Freixenet México, Vinaltura y Vinícola Regional de Ensenada.
El Consejo Mexicano Vitivinícola explicó que el objetivo del evento fue “ampliar el conocimiento de la producción vitivinícola (de México) entre el público profesional francés” en el espectacular edificio de la Ciudad del Vino, un museo inaugurado hace dos años de 13 mil metros cuadrados dedicado al vino.
“Se trata de una muestra representativa de la diversidad vitivinícola de la que presume el país azteca”, comentó la organización vitivinícola mexicana.
Durante el evento, el sumiller Omar Barbosa contó a los asistentes la historia de los viñedos mexicanos y la mediadora enocultural, Pauline Brumauld, explicó las peculiaridades de las principales regiones vinícolas de México: Baja California, Coahuila y Querétaro.
De su lado, la chef mexicana afincada en Francia Mercedes Ahumada realizó platillos de degustación de la gastronomía mexicana para acompañar a la prueba de las distintas variedades de vinos.
“México no puede quedarse ajeno a las tendencias mundiales y la forma más efectiva de involucrarnos fue la decisión sobre nuestra reintegración a la Organización Internacional de la Viña y el Vino y convertirnos en socios oro de este museo”, comentó el presidente del Consejo Mexicano Vitivinícola, Daniel Milmo Brittingham.
A la presentación asistieron un centenar de importadores, sommeliers, prensa especializada y sector de la restauración a los que se explicaron las virtudes y cualidades de los vinos de las bodegas mexicanas participantes y los orígenes de estos viñedos.
El evento fue el segundo de este tipo que se realiza en Francia en 2018, después de la presentación de caldos mexicanos premium que tuvo lugar en París el pasado mes de abril.
Las presentaciones se realizan dentro del proyecto del Consejo Mexicano Vitivinícola denominado «Promoción y Fortalecimiento de Capacidades comerciales del Sector Vitivinícola Nacional», apoyado por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA).
La industria vinícola mexicana ha ido al alza en la última década, según fuentes del Consejo Mexicano Vitivinícola (CMV). Cuenta con seis mil 500 hectáreas de producción y unas 200 unidades de negocio que ofrecen más de mil 200 etiquetas diversas.
La Ciudad del Vino de Burdeos es un espacio sobre la cultura y el mundo del vino en el que los visitantes pueden degustar y comprar decenas de vinos del mundo construida con la vocación de mostrar los vinos de los cinco continentes.