La compañía brasileña JBS informó, a través de un comunicado, su estado de resultados del segundo trimestre de 2017. En el cual se indica una utilidad trimestral neta de US$97,16 millones (R$309,8 millones) en el segundo trimestre del año, una caída de 79,8%, con respecto al mismo período del año pasado, cuando la compañía mostró una utilidad de US$479,7 millones (R$1,53 billones). En el primer trimestre del año, la utilidad neta fue de US$132,4 millones (R$422,3 millones).
En el segundo trimestre de 2017, la utilidad trimestral neta de JBS fue de US$97,16 millones, indicando un desplome de 79,8%, ya que el mismo trimestre del año previo se obtuvo una utilidad de US$479,7 millones.
Los gastos financieros de la empresa fueron de US$689.742.613 (R$2,2 billones) entre abril y junio, la cifra más baja en cinco trimestres. Esto se debió, según el comunicado, a gastos provenientes del primer semestre, resultado de la variación cambiaria, de ajuste en operaciones con derivados y pago de intereses.
Por otra parte, las ganancias previo al cálculo de impuestos, intereses, amortización y depreciación, una medición de la rentabilidad operativa, alcanzaron US$1,16 billones (R$3,7 billones), por sobre la estimación de consenso de US$1,07 (R$3,4 billones), mostrando los resultados operacionales positivos de JBS en Estados Unidos, Australia y Canadá.
Los ingresos netos de la compañía cayeron 4,6% con respecto al mismo período del año anterior. Se quedó en US$13,04 billones (R$41,6 billones) entre mayo y junio de este año, frente a los US$13,67 billones (R$43,6 billones) reportados en el mismo período del año pasado. La caída de los ingresos se atribuyó a la reducción de ingresos de Seara y de JBS Mercosur en 6,1% y 14,2%, respectivamente. La valoración del real frente al dólar en el período, que pasó de R$3,51 a R$3,21, también contribuyó a la caída de los ingresos.
Según la compañía, los ingresos netos de Seara cayeron 6,1% en el segundo trimestre con respecto al mismo período del año pasado, de US$1,44 billones (R$4,6 billones) a US$1,35 billones (R$4,3 billones). Los ingresos de JBS Mercosur cayeron de 14,2% en el período, pasando de US$2,26 billones (R$7,2 billones) a US$1,91 billones (R$6,1 billones) en 12 meses.
En este segundo trimestre, aproximadamente 73% de las ventas totales de JBS se contabilizaron en los mercados internos donde opera la compañía, mientras que sólo 27% correspondió a exportaciones, señala el comunicado de la compañía.
La compañía no pudo reducir su deuda. En el segundo trimestre del año, saltó de 5,4%, de US$14,99 billones (R$47,8 billones) al final del primer trimestre del año a US$15,77 billones (R$50,3 billones) al final del segundo trimestre. De la deuda total, según la empresa, el 93% está vinculada al dólar. La caja de la empresa, al final del período, estaba en US$3,54 billones (R$11,3 billones), un aumento de 5,4% en relación a la caja del primer trimestre, que cerró en 3,35 billones (R$10,7 billones). La deuda subió, según la empresa, en función de la depreciación del real y de la compra de Plumrose, una empresa estadounidense, que totalizaron US$878 millones (R$2,8 billones).
La compañía JBS no pudo reducir su deuda, ésta saltó de 5,4%, de US$14,99 billones, al final del primer trimestre del año a US$15,77 billones al final del segundo trimestre de 2017.
De acuerdo con la empresa, la deuda a corto plazo subió de US$5,58 billones (R$17,8 billones) a US$5,71 billones (R$18,2 billones), un alza de 2,1%. Los compromisos a largo plazo subieron a 6,8%, de US$3,35 billones (R$10,7 billones) a US$3,54 billones (R$11,3 billones).
En julio, JBS finalizó con sus principales acreedores, instituciones financieras locales y extranjeras, un acuerdo que garantiza la congelación del pago de las deudas por un plazo de 12 meses. Según la compañía, esos “acuerdos de preservación de líneas de crédito” suman US$6,43 billones (R$20,5 billones), equivalentes al 93% del total de la deuda contraída por JBS Brasil en este país y en el exterior.
En el comunicado, JBS cita que el plan de desinversión anunciado por la empresa debe generar una entrada en la caja de US$1,8 (R$6 billones). Según Wesley Batista, esas iniciativas son importantes para que JBS continúe creciendo de forma sostenible y generando valor a sus accionistas.
JBS también destaca el anuncio del plan de desinversiones, que debe generar ingreso de caja de US$1,8 millones (R$6 billones), según la empresa. Los activos incluyen la participación de 19,4% en Vigor, Moy Park y Five Rivers. El desempeño del trimestre también repercutió en el sector como un todo después de la catástrofe de la Operación Carne Débil por la Policía Federal, el 17 de marzo, que influenciaron en los precios internos y también en el volumen exportado, con el cierre de algunos mercados externos.
Después de la venta de Alpargatas, de Vigor y de la unidad JBS Mercosur, el Grupo J & F venderá pronto a Eldorado, empresa de celulosa. Con el desistimiento de la compañía chilena Arauco, tres compañías asiáticas mostraron interés por el activo e hicieron propuestas por sobre los US$ 4,23 billones (R$13,5 billones) ofertados por Arauco. Entre los competidores están la estatal China Paper Corporation, y las indonesias Asia Pulp & Paper Group (APP) y April.
La compañía forestal Arauco, ligada al grupo Angelini, desistió definitivamente el interés por comprar la productora de celulosa Eldorado en Brasil, tras dos meses de negociaciones, luego de no llegar a un acuerdo con sus accionistas liderados por J&F Investimentos, relacionados con los hermanos Batista. Por lo cual, la compañía chilena desarrollara proyectos locales. El Mercurio -13/08/2017.
Estos magros resultados de JBS estuvieron marcados por una serie de acontecimientos por una parte, durante el primer trimestre, la economía brasileña sólo creció 1%, con respecto a igual período del año anterior. No obstante, lo que más perjudico a esta compañía brasileña fue el escándalo de corrupción de la carne débil en el cual estuvieron ligados sus propietarios en primera persona.