En una reunión celebrada el pasado mes de noviembre, en el marco del la primera Exposición Internacional de Importaciones de China, entre el Comisario de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Vytenis Andriukaitis, y el Ministro de la Administración General de Aduanas de China, Ni Yuefeng, el representante chino se comprometió a reducir los certificados que deben presentar los productos de bajo riesgo (como es el vino) en dicho mercado.
Andriukaitis aseguró que China debe cumplir su promesa de abrir su mercado, ya que las compañías europeas se quejan de las dificultades que enfrentan en el país.
Los productos agroalimentarios europeos desempeñaron un papel importante en la Exposición Internacional celebrada en Shanghai y descrita por el presidente chino Xi Jinping como una iniciativa para «profundizar la cooperación empresarial internacional para la prosperidad y el progreso compartidos».
Andriukaitis, quien encabezó la delegación de la Comisión Europea, confiaba en el impacto positivo que la exposición podría tener en la venta de más alimentos y bebidas europeos a 1.300 millones de consumidores chinos.
En el contexto de las continuas dificultades en el comercio global, «se pueden ver buenas oportunidades para que las empresas de la UE ingresen de manera mucho más activa en China, teniendo en cuenta la promesa del presidente chino de mantener el mercado abierto», dijo. «Hoy es un muy buen ejemplo de cómo podemos animar a nuestras empresas a comprender que ahora es el momento de actuar», agregó el Comisionado lituano cuando visitó los stands de una docena de países europeos.
Los productos agroalimentarios europeos son cada vez más populares entre los consumidores chinos, especialmente el vino. Los funcionarios de la UE explicaron que los asiáticos valoran la seguridad del vino, un producto que está «de moda» en China.
El Comisario enfatizó que la prioridad ahora debería ser traducir las palabras de Xi en acciones. «Necesitamos discutir temas relacionados con la implementación con el gobierno chino», agregó.
China es la mayor fuente de importaciones de la UE y su segundo mercado de exportación. China y Europa negocian en promedio más de 1.000 millones de euros al día. China ocupa el segundo lugar después de EE. UU. Como principal destino de exportación de productos agroalimentarios europeos, con casi 12.000 millones de euros en 2017 (8,7% del total). Aún así, el mercado chino ofrece «mucho potencial» a las empresas europeas, agregaron los funcionarios de la UE.
ACUERDO A FINALES DE AÑO
Se espera que las ventas sigan creciendo, especialmente una vez que la UE y China concluyan un acuerdo para proteger alrededor de 100 indicaciones geográficas (IG) de cada lado.
Bruselas y Pekín redactaron las listas el año pasado. Sin embargo, el gobierno chino regresó con solicitudes de última hora para agregar IGs no agroalimentarias a la lista, incluyendo cerámica y otros productos artesanales, explicaron los funcionarios de la UE.
Sin embargo, estos productos no pueden protegerse como IG según la legislación de la UE, y este hecho ha relentecido las negociaciones.
No obstante, a pesar de estas diferencias, los funcionarios de la UE tenían la esperanza de que se pudiera alcanzar un acuerdo final para fin de año.
Una vez que este acuerdo entre en vigor, se agregará una lista adicional de 200 productos en forma incremental en los próximos cuatro años.
Entr los productos de la UE que forman parte de la lista se incluyen vodka polaco, whisky irlandés, jamón español, queso manchego, salmón escocés, queso feta, cerveza checa y vinos españoles y portugueses.
Francia, Italia, España, Grecia, Portugal y Gemany son los países con el mayor número de productos protegidos en función de sus orígenes.
La posición de la UE en la exposición de importación de China estaba totalmente dedicada al sector agroalimentario, como parte de la ofensiva de encanto del bloque para promover los productos de la Política Agrícola Común.
Desde 2016, las instituciones de la UE y los estados miembros han puesto a disposición 200 millones de euros para promocionar los alimentos y bebidas europeos dentro del mercado interior y más allá de las fronteras de la Unión.
Se espera que la Comisión publique en los próximos meses un informe para evaluar los primeros tres años de este nuevo instrumento, explicaron los funcionarios de la UE.