El amaranto, que hace cientos de años fue considerado un alimento para dioses, hoy está al alcance de todos y es considerado uno de los alimentos más ricos y nutritivos en México.
De acuerdo al Atlas Agroalimentario 2016, entre los principales productores de amaranto en nuestro país destacan Tlaxcala, Puebla y el Estado de México.
Por sus propiedades nutritivas y medicinales, el amaranto ha sido preferido por deportista y hasta astronautas.
El amaranto tiene muchas propiedades:
- Minerales y vitaminas naturales A, B, C, B1, B2, B3.
- Niacina, calcio, hierro y fósforo.
- Aminoácidos como la lisina.
- Bajo en grasa.
- Carbohidratos saludables.
- Ideal como fibra dietética y laxante. Es 100% digestivo.
- Reduce los niveles de colesterol.
- En su estado natural se utiliza contra la osteoporosis y la anemia.
El amaranto se come de muchas formas: en granola, tamales, atoles, galletas, sopas, platillos, tortillas y las famosas “alegrías”, dulce típico mexicano, entre otras.
Cabe mencionar que, dentro de las investigaciones publicadas en mexicotierradeamaranto, destaca que el amaranto está considerado por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación como el mejor alimento de origen vegetal para el consumo humano.
Afortunadamente el amaranto dejó de ser alimento para dioses y está al alcance de todos para alimentarnos, nutrirnos y vivir sanos.