La situación del agua en México es compleja y delicada, tanto que se ha declarado como un asunto de seguridad nacional. El uso del agua se distribuye desproporcionadamente, ya que la actividad agrícola consume el 77% del total de agua disponible, el 23% restante se distribuye en otras actividades como sector público e industria, según datos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).
Una de las principales tareas de la CONAGUA es tecnificar para hacer más eficiente el empleo del agua en el campo, estima que entre el 15% y 50% del agua extraída para la agricultura de riesgo llega a zonas de cultivo y la mayoría se pierde durante la conducción o por evaporación antes de ser aprovechada por la planta. Parte de esta agua retorna a las corrientes de agua o acuíferos, pero su calidad se degrada por contaminantes como plaguicidas, fertilizantes y sales que se lixivian por el suelo.
La dependencia señala que actualmente se está intentando incrementar la eficiencia del agua mediante sistemas modernos de riego presurizados. La modernización y tecnificación del riego permitirá incrementar la productividad del agua en 2.8% anual, medida en kilogramos de alimentos o fibras por metro cúbico de agua utilizada en los distintos riegos.
Estos sistemas de tecnificación de riego ahorran cerca de mil millones de metros cúbicos de agua en México. Tan sólo en 2016 fueron tecnificadas alrededor de 101 mil 556 hectáreas, lo que permitió alcanzar más de 428 mil hectáreas.
Es por eso que la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) está enfocando esfuerzos en lograr la tecnificación de un millón de hectáreas, meta que se propuso realizar en el 2018.
Hasta el día de hoy, la superficie tecnificada a nivel nacional representa alrededor de 30 por ciento de las 22 millones de hectáreas que son sembradas en el país, lo que pone a México en la sexta posición a nivel mundial en este rubro y que le ha permito consolidar un campo más productivo y sustentable.
Los sistemas tecnificados que la SAGARPA implemente en apoyo al campo son riego por aspersión, pivote central, cañón viajero, aspersión fija y aspersión portátil. Así como goteo, microaspersión, multicompuertas, sistemas mixtos, válvulas alfalferas y obras de drenaje agrícola.