Canadá podría ser muy buen mercado para el cannabis de México, cuenta con elementos necesarios como clima, tierra y mano de obra para exportar mariguana de uso lúdico, que en el año 2020 podría tener un valor aproximado de hasta 30 mil millones de dólares, una cifra 15 veces mayor que la generada por las ganancias del aguacate, lo cual podría darle un impulso enorme a la economía nacional.
Así lo afirmó Guillermo Nieto, fundador de la Asociación Nacional de la Industria Canábica (ANICANN), quien subrayó que el país podría también explotar los múltiples usos industriales de la planta, con la consecuente generación de miles de empleos, si el próximo gobierno federal les da el impulso adecuado a estos proyectos.
El agricultor y empresario señaló que México está frente a la oportunidad de aprovechar la despenalización de la mariguana con uso recreativo en Canadá, declarada en junio de este año, para abastecer el mercado de ese país, que podría llegar a los 5 millones de usuarios.
“El cannabis es una planta y por lo tanto debemos verla como un tema 100 por ciento agrícola. Nuestra situación geográfica y clima nos dan los elementos perfectos para que esta planta se pueda dar ¡hasta en el Periférico!, pero por la ilegalidad no hemos podido avanzar” en su aprovechamiento comercial lícito, lamentó el fundador de la empresa agrícola Love and Health.
Añadió que aunque en muchos países o regiones el cannabis ha dejado de ser ilegal y se transformó en una industria muy lucrativa, la política prohibicionista de México hace que se siga sembrando a escondidas, por campesinos que no tienen tecnología, ni tractores ni fertilizantes.
Subrayó que aquí en México el cannabis puede producirse todo el año a costos relativamente bajos, a diferencia de Canadá, donde el clima y la ubicación geográfica hacen mucho más cara la siembra local, que necesariamente debe hacerse en invernaderos y con luz artificial.
Según los cálculos de la ANICANN, el mercado de aquel país podría tener un valor de hasta 30 mil millones de dólares en 2020, tan sólo por consumo lúdico, a lo cual puede sumarse la producción con fines medicinales e industriales.
“Podríamos detonar una nueva industria agrícola que ayudaría muchísimo al país y transformarlo, si logramos hacer un esquema de primer mundo de agricultura por contrato, donde el productor ya sepa cuánto le van a pagar” por su cosecha, indicó Nieto.
El empresario destacó que además del uso lúdico, el cannabis tiene más de 2 mil posibilidades de uso industrial, entre ellos los de generar plásticos, papel, textiles, polímeros y hasta concreto, por lo que su producción serviría no sólo para reactivar la economía, sino también para proteger el medio ambiente.
“Necesitamos que el nuevo gobierno le dé la formalidad y el reglamento para crear una industria que va a generar miles de empleos y millones de pesos en impuestos. Sólo necesitamos regularlo, igual que se hace con el tabaco y el alcohol, no hace falta inventar el hilo negro”, subrayó Nieto, quien llamó a desestigmatizar el cannabis mediante el debate informado. (La Jornada)