La inflación nos afecta a todos. Si notaste un incremento en los precios de la fonda en la que comes durante este año, es resultado de los cambios en los precios de la materia prima que utilizan para realizar sus platillos.
Los aumentos en el precio de diversos productos tienen diferentes explicaciones: Estacionalidad, desastres naturales, oferta y demanda, y cambios en las vías de transporte de diversos productos, aún dentro de territorio nacional. Por supuesto, también en ocasiones se puede prestar a prácticas deshonestas de alguno de los involucrados en su producción, distribución, o venta.
Con datos del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), podemos conocer la variación en el precio de algunos productos, que no sólo utilizamos en casa, son la materia prima del trabajo de muchos negocios de comida en los que las personas acudimos todas las tardes.
¿Encareció tu fonda o notas porciones más pequeñas?, no es necesariamente resultado de una mala administración del negocio, la inflación termina golpeando también a negocios pequeños.
Los supermercados son los comercios en los que se registró una variación más clara en el precio de los alimentos. Esto no quiere decir necesariamente, que sean los lugares más caros para comprar alimentos.
En el caso del frijol negro, la variación en estos comercios fue de 24%, en contraste con los mercados públicos, que fue sólo del 1%; del 8% en carne de res, para los supermercados, sin variación en el mismo periodo para los mercados; y 13% en el litro de leche contra 6% en mercados.
Sólo el azúcar presentó una variación en el precio superior en los mercados (9%), y se mantuvo estable en los supermercados, pero habrá que considerar que durante todo el año, resultó más barato adquirir este producto en los primeros.
Lo recomendable, aunque consuma más tiempo, es intentar comparar los precios entre diversos tipos de productos, para adquirir los mismos bienes a precios más competitivos.