Sabemos que el maíz es uno de los principales alimentos en el mundo; pero ¿Sabias que ya se pueden hacer Tejidos y telas?
El uso aplicado de fibras y telas a base de maíz tiene su historia desde los años 20´s con la llamada “revolución de materiales” porque se realizaron investigaciones químicas que hoy en día permiten aplicarse a productos del campo, este es el caso de la técnica de polimerización que consiste en unir moléculas modificando su comportamiento y composición.
¿Cómo se hace?
Es un procedimiento interesante; Se extrae del endospermo (Tejido interno de los granos de maíz, rico en dextrosa y almidón) protagonistas para el proceso de purificación.
Se utiliza la técnica de polimerización que consiste en unir moléculas modificando su comportamiento y composición.
Después de este procedimiento el resultado final son filamentos largos enrollados o una resina de morfología cristalina y blanda, lo que la hace más suave que el nylon y más resistente y elástica que el algodón.
Los costos de producción son 40% más bajos porque se ahorra energía que cuando se utilizan petróleo y sus derivados y reduce en un 63% las emisiones de gases de efecto invernadero.
Es una alternativa ecológica que impulsa a campesinos y productores a expender su mercado.
¿Que beneficios tiene?
- Protege la piel contra los rayos ultravioletas
- Posee una resistencia natural a las manchas y al cloro
- Seca rápido gracias a la gestión de humedad
- Se tiñe a bajas temperaturas
- Su recuperación al estiramiento no lo consigue ninguna otra tela natural o artificial, hasta un 120% de tensión sin sufrir deformación
- Los costos de producción son 40% más bajos porque se ahorra energía que cuando se utilizan petróleo y sus derivados y reduce en un 63% las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Es una alternativa ecológica que impulsa a campesinos y productores a expender su mercado.
¡Y lo mejor! es que estos tejidos están libres de bacterias descartando todo tipo de alergias.
¿Puedo usar cualquier Maiz para esto?
El maíz que puede ser utilizado como fibra ecológica, es un maíz genéticamente modificado que cumple con ciertos requisitos como “Alta cantidad de almidón y dextrosa”, este maíz es conocido por su resistencia a insectos y tolerancia a herbicidas, lo que nos hace pensar que NO es bueno como alimento pero ideal para la elaboración de:
- Alfombras
- Prendas
- Forrajes
- Interiores de automóviles
Y un sinfín de aplicaciones en el ámbito textil que ofrece una menor dependencia de combustibles fósiles y una menor huella ambiental.