Cerca del 70% de la basura que se genera en los hogares es desperdicio orgánico, el cual puede ser muy útil para la elaboración de abono para las plantas; pero procesar ese desecho requiere de tierra, constancia y tiempo, para que aproximadamente en 2 o 3 meses quede el abono listo para usar.
Pero como casi nadie tiene un espacio con tierra, tiempo para realizar el proceso ni ganas para hacerlo, existe una nueva máquina procesadora de alimentos que permite reciclar los restos de comida para convertirlos en abono. Esta innovación se puede ajustar a la cocina como cualquier bote de basura convencional y su funcionamiento es muy sencillo.
Utiliza un sistema completamente automatizado, sólo se tiene que verter el contenido orgánico desechado, pulsar un botón y el sistema los procesa para producir fertilizantes en tan sólo 24 horas y utilizarlo para abonar macetas o jardines. El volumen de los residuos se reduce a unos dos tercios aproximadamente de su tamaño original, de forma que también soluciona problemas de acumulación de basura.
No se conoce a detalles del proceso que se produce dentro de la máquina, pero utiliza oxígeno, humedad, calor, un aditivo de origen vegetal, que puede ser cáscaras de coco junto con bicarbonato de sodio y un agitador, que permite reducir el volumen de los desechos.
Por lo pronto esta máquina ecológica será de uso doméstico, se tiene previsto lanzar una campaña de crowdfunding en Indiegogo para financiar este electrodoméstico directamente con la persona que los fabrica, donde se espera que su precio sea de 699 dólares, más o menos la mitad de lo que valdrá cuando llegue al mercado.
Fuente: Whirlpool, CONACYT